jueves, 23 de diciembre de 2010

Si no recuerdas la más ligera locura en que el amor te hizo caer, no has amado.

Algunos amores cuando llegan suelen ser bastante ciegos y cuando se van, demasiado lúcidos. Hay muchos tipos de amor, pero todos hilvanados por el mismo hilo que los enlaza. Decirle a alguien te amo, no es lo mismo que pensar te deseo o me siento atraído por ti. Sucesión de secuencias próximas y lejanas. Variedad de fenómenos, que van desde el enamoramiento, al amor ya establecido y de ahí a la convivencia. Trayecto clave, decisivo, terminante de lo carismático a lo institucional. Transitamos de la sorpresa que es descubrir e irse enamorando, para alcanzar una fórmula estable, duradera y persistente. Unas y otras engendran diversos estados de ánimo: sentirse absorbido, estar encantado, dudar, tener celos, desear físicamente, percibir las dificultades de entendimiento, decepcionarse, volverse a entusiasmar. Las fronteras entre unas y otras son movedizas. Cuando el animal tiene lo que necesita, se calma y deja de necesitar. El hombre es un animal en permanente descontento. Siempre quiere más. Por eso, el conocimiento de lo que es el amor le va llevando hacia lo mejor. Tira, empuja, se ve arrastrado por su fuerza y su belleza. Su menesterosidad es biográfica. El amor es lo más importante de la vida, su principal guión. Lo expresaría de forma más rotunda: yo necesito a alguien para compartir mi existencia.

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