El 30 de Marzo del presente cronólogico, publiqué, al menos para mí, un interesante título; "Para cultivar el milenario arte del Buen Pensar", junto con alguna cita de Einstein, que bien hacía referencia dicha eminencia científica a la divinidad del espíritu.
Desde antes de aquella nota, mi descubrimiento, permanecía en mi escritorio, para que de vez en cuando y sólo si me daba el tiempo, repasar los escritos, y las publicaciones de dicha página, temas, soliloquios y reflexiones que cada vez que leo, descubro algo nuevo, y que considero un tesoro, y es tal la riqueza que quise compartirla, porque del modo que me llegó, sólo puedo atribuirlo a un hecho predestinado, ya convencida de que toda acción no sucede al azar, está "perfectamente" bien hecho por Él.
¡ Elí, Elí !
Lama Sabactini
(Grito de victoria de Jesucristo en la Cruz)
1ra traducción griega del arameo;
¡Dios Mío, Dios Mío!
¡Para este propósito fuí reservado!
Y aquella otra traducción o interpretación de lamento y abandono, más que de victoria, es la que universalmente hemos conocido o nos la enseñaron desde antaño,circulando en las escrituras sagradas y proclamada sensacionalistamente en versiones musicales y del cine.
Sin embargo, el libre albedrío me dice que la primera traducción, es la correcta, única y verdadera clamación y grito de VICTORIA que Jesucristo nos dejó.
Lo que me invita a Pensar divina y no humanamente, esta Vida es un tránsito y no es la única, y que cada Muerte es un paso más...hacia la Luz.